jueves, 5 de abril de 2012

Éxtasis en estado puro.

Lujuria, libídine, picardía erótica. Muérdeme, bésame, abrázame, acaríciame, túmbame en tu cama, sigue besándome, quítate la camiseta, no pares de besarme, acaricia de nuevo, esta vez por dentro de la camiseta. Ponte encima mía, sigue besándome, nadie te dijo que pararas, acaríciame el cuello con tus labios, dame besitos en la mejilla, y vete acercándote lentamente a mis labios, desabróchame el cinturón, quítate los pantalones, continúa besándome, sin parar, cierra los ojos, abrázame… Y el resto es pan comido.

Nada se sabe del amor hasta que se ama.

Una vida sin amor es incompleta, pues nadie es capaz de explicar lo que un simple sentimiento puede llegar a hacer en la vida de las personas. Querer es inevitable, te ayuda a crecer y ayuda a que otros crezcan. A veces las tristezas tienen que ver con las personas que se van y eso duele. En esos momentos juramos no volver a encariñarnos con nadie y desde que conocemos a otros especiales olvidamos esa promesa que nunca llegaremos a cumplir. Y así es cómo vamos dejando huellas en el corazón de las personas y cómo éstas, a su vez, dejan huellas en el nuestro. Cuando alguien se va lloramos porque el corazón nos pide a gritos esas lágrimas, esas pataletas, para aliviar un poco el dolor que estamos sintiendo. No obstante, cuando nosotros nos marchemos, en algún rincón del mundo, habrá alguien que llorará por el simple, pero a la vez complejo hecho, de que ellos también nos quisieron.            

Echar de menos lo que era, y no poder remediarlo.

Estar cansada de ver que tienes a quien más quieres y aún así parece que no es suficiente para tener una sonrisa de aquí a Nueva York. Entender que los que algún día lo fueron todo, mienten, olvidan, decepcionan, se reducen a nada. Pensar que el día a día ya no vale tanto la pena, dejar de creer en tus convicciones. No luchar por tus sueños. Esbozar a penas unas cuantas sonrisas. Bipolaridad diaria, horaria, y hasta a cada minuto.

Y ajustar la realidad, sintonizar nuestra felicidad.


Adornaré cada amanecer despertándome a tu lado. Cabalgaremos en la brisa que conecta tu sonrisa con los sueños, siendo presa del pasado.

viernes, 30 de marzo de 2012

Quiero que la noche sea eterna;


Quiero que mi cuerpo sea víctima de tus dedos  y que los poros de tu piel sean mi alimento.  Quiero que tu lengua busque mis rincones  hasta encontrarme el alma en un suspiro. Quiero beberme todas tus esencias, hasta calmar mi sed con tus temblores  y sentir el placer mientras tú habitas  las más tiernas moradas de mi cuerpo. Con nuestras almas en un solo deseo y nuestros cuerpos en un solo universo,  te entregaré sin condiciones, mi pasión y mi locura para que dispongas de la cura. Quiero la noche eterna,  quiero que el día no exista  para estar entre tus brazos  y hundirme en tus caricias. Quiero un beso tan profundo, que no deje lugar a dudas y que haga de la existencia una tortura.  Quiero fundirme contigo, estar dentro de ti como un fuego imposible de apagar. Quiero abrazarte fuerte  para que no puedas escapar. Quiero que la noche no muera, quiero que sea eterna para amarnos con más fuerza.


miércoles, 28 de marzo de 2012

Por morder tus labios;

''Yo te dije lo que soy, un tirado, un cualquiera, que malvive a su manera. Duermo poco, bebo mucho, moriré en la carretera, o a los pies de una farola. No me creas mucho, aunque no te mienta. Vivo al día y a la noche, tengo malas compañías, porque son mis preferidas. No sé qué coño esperabas. No me entiendo ni a mí mismo, siempre me saco de quicio. Yo me siento sólo, aunque esté contigo. No sé vivir sin ti, no sé vivir contigo. Cuando reviente todo, seguirás por tu camino. Para siempre es mucho tiempo, una noche es poco rato. Me jugaría la boca, por morder tus labios. No me tientes que entro al trapo. Yo no quiero madrugadas,sin compartir almohada. Se nace y se muere sólo, y en mitad de ese camino, quiero un rato divertido. Nunca me gustó la fama. Si me miro en el espejo, no sé quién está ahí dentro. Si me aferro al mini bar, es porque no queda nada por aquí, que alegre mi mirada. Quién fuese papel, pa’ que me liaras.''